La Adolescencia y su Acompañamiento con Flores de Bach

La adolescencia es un periodo de cambio y transformación en el desarrollo humano como es la infancia o la madurez. Supone un proceso de separación de los padres  para conseguir la propia autonomía e independencia.

Cronológicamente  es una etapa que se sitúa entre los 14 y los 19 años, aunque el comportamiento propio de la adolescencia pueda darse antes o después de este período.

 

Dificultades que pueden surgir en esta etapa.

En el proceso de individuación de los chicos y chicas pueden surgir miedos  (Mimulos) a la hora de emprender estos cambios.

En esta etapa los chicos y chicas experimentan grandes cambios físicos, les cambia la voz, se desarrollan sus órganos sexuales, pegan el conocido estirón, comienzan a tener acné… Todos estos cambios les inquietan y a muchos de ellos no les gustan, pudiendo sentir un rechazo hacia su propio cuerpo. 

Genciana es la esencia adecuada para no desalentarse cuando estos cambios no los ven positivos y Crab Apple les ayudaría a no avergonzarse de su propia imagen.

 La imagen física es sin duda muy importante para ellos. Algunos pueden llegar incluso a sentirse rechazados en su grupo de iguales por tener algún defecto físico. Esto les puede generar tristeza (Mustard), desánimo (Genciana), apatía (Wild Rose) o un sometimiento excesivo a los demás para no sentirse rechazados (Centaury).

A los padres también les cuesta adaptarse a estos cambios (Walnut).  A muchos de ellos les da miedo que sus hijos crezcan (Mimulo) porque les cuesta mucho aceptar que tienen capacidad para dirigir su propia vida y porque tienen miedo a quedarse solos o añoran y echan de menos la infancia de sus hijos, etapa en la que dependían completamente de ellos.

En ésta búsqueda de identidad muchos de ellos se someten a los gustos y opiniones del grupo sin tener valor para reconocer que ellos son personas diferentes. (Centaury).

Algunos tienen verdaderas dificultades para tomar sus propias decisiones. (Cerato, Scleranthus).

Otros no tienen una adecuada autoestima, fruto de la disarmonía entre sus propias capacidades y las conquistas realizadas. Sienten que no pueden hacer determinadas cosas y se sienten tímidos e inseguros por ello (Larch)  o  sienten un miedo que les paraliza y les inhibe a la acción (Rock Rose).

Es una etapa de muchos conflictos familiares y de confrontación con los padres. En estos casos es muy conveniente que tanto los padres como los adolescentes tomen Holly y Willow  para la rabia y el resentimiento que sienten y Vervain si hay mucho apasionamiento en las discusiones. 

La adolescencia es un proceso en el que tanto los hijos como los padres tienen que aprender a ser tolerantes (Beech, Impatiens, walnut) y aprender nuevas estrategias para solucionar conflictos manteniéndose unidos pero diferenciados.

Los padres también pueden sentirse influenciados por los consejos y relatos de amigos y parientes, sin saber muy bien qué dirección tomar. (Cerato). También  podrían tomar Centaury si se sienten sometidos a lo que los hijos les demandan y exigen, muchas veces de muy malas maneras.

Algunos padres empiezan a dormir mal  porque les invaden las preocupaciones, que le ocurra algo al hijo o a la hija, que empiecen a fumar o incluso tomen drogas, salgan con chicos/as  (Impatiens, Mimulo, White chestnut, Red Chestnut) .
Algunos pueden tener fantasías negativas sobre lo que puede ocurrirles a sus hijos y están muy ausentes pensando en las posibles desgracias que pueden sucederles (Clematis, Red Chestnut).   

Muchos padres por miedo  a que sus hijos se “metan en problemas” tienden a controlarlos mucho y convierten su casa en un cuartel con mucha disciplina y normas a lo que los hijos responden en ocasiones con rebeldía y así se generan conflictos con los padres continuamente (Holly, willow).

 La rebeldía de ciertos adolescentes les puede llevar a realizar conductas de riesgo y a sufrir el consiguiente pánico por lo que han hecho (Rock Rose).

Estos son solo algunos de los conflictos que pueden aparecer en la adolescencia entre padres e hijos. Cada familia tendrá sus circunstancias especiales pero como veis las Flores de Bach nos ayudan a  mejorar la calidad de las relaciones entre padres e hijos. 
  

Dedicado a mis hijos adolescentes, Adrián y Aitana de los que tanto aprendo de esta etapa.                 

                                                                     Mercedes López Redero